Aunque ya hemos hablado de cómo hacer una limpieza efectiva del hogar, también es importante desinfectar los artículos y rincones de nuestro hogar. Para que la desinfección del hogar sea efectiva, te compartimos algunas recomendaciones.
El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomienda para la limpieza y desinfección del hogar:
Antes de limpiar el baño, lavarse las manos con agua y jabón y retirar todos los artículos que se utilicen como jabones, esponjas y cepillos. Una vez que el área está libre, eliminar el polvo. Después, utilizar un paño de tela o microfibra y verter algún limpiador desinfectante o cloro. Pasarlo por paredes, lavabo, sanitario y ducha.
Nunca utilizar el mismo paño para limpiar múltiples superficies. Asegurarse de tener un paño para cada espacio para evitar que los gérmenes se extiendan. Después de cada uso, lavar los paños y dejarlos secar muy bien.
Una vez que se han limpiado las superficies antes mencionadas, quitar con agua el producto en las áreas donde se vertió y secar con un trapo diferente. Al final, limpiar con agua y jabón el piso, después secarlo. Para las toallas, se recomienda que cada miembro de la familia tenga la suya y lavarlas por lo menos dos veces por semana a una temperatura de 60° (mínimo).
Evitar dejar restos de agua en las cazuelas. Las superficies de alto contacto como mesones, escritorios o manijas deben ser desinfectadas mínimo dos veces al día. Con otras menos frecuentadas asegurarse de que no se llenen de polvo y limpiarlas cada dos días.
Otra sugerencia es no mezclar los utensilios de limpieza utilizados en la cocina con los de otras zonas del hogar. También es importante cambiar los trapos o paños cada tercer día y de vez en cuando meterlos en cloro con agua fría.
Una buena ventilación es clave, es fundamental para que el aire se renueve y las partículas que quedan en suspensión desaparezcan. Se debe hacer diario, mínimo durante 15 minutos al día, en todas las habitaciones. Durante el día dejar abiertas puertas y ventanas, esto ayuda a que circule el aire y entre la luz del sol. Limpiar diariamente el polvo que se acumula en muebles, puertas y cortinas.
Para la limpieza de artículos electrónicos, utilizar toallitas a base de alcohol o un rociador que contenga al menos un 70% de alcohol. Después secar para evitar la acumulación de líquidos.
Para el caso de las sábanas, se recomienda lavarlas cada semana o máximo cada 15 días. Lo mejor es emplear agua templada o caliente, entre 40 y 60°, para eliminar bacterias, ácaros y restos de suciedad.
En este tiempo es de suma importancia la limpieza constante de todos los artículos del hogar y desinfectarlos correctamente para evitar el contagio y desarrollo de enfermedades. Hoy más que nunca, el cuidado de la salud e higiene en el hogar cobra mayor importancia. En Tierra y Armonía queremos que cuides de los tuyos y no pongas en riesgo a tu familia, protégete.
Con apoyo de Economía Hoy & El Tiempo